Fue todo uno, dejar aparcado este blog para centrarme en el de mis amigos de la Peña Españolista Doctor Gert y comenzar un annus horribilis de difícil parangón incluso para los acostumbrados sufridores pericos.
Cual Doctor Jekyll, el equipo que maravilló en la primera vuelta por su implacable regularidad, mutó en un irreconocible Mr. Hide capaz de perpetrar la segunda vuelta más infame que a una plantilla blanquiazul se le recuerda.
Una plantilla corta, lesiones, ausencias, egos mal llevados, una secretaría técnica sin recursos y un entrenador ensimismado y con poca cintura táctica, derivaron en una caida larga y agónica, que produjo una hemorragia de puntos que únicamente el final de liga pudo cauterizar. Si la competición hubiese durado un par de partido más, el paciente hubiese fenecido desangrado.
Alegremos pues de la primera vuelta realizada, que ha permitido que fuesen los maños y no nosotros los que emigraramos a la liga BBVA.